alergias

Las alergias y su significado emocional

Las alergias surgen como una reacción exagerada o desproporcionada del sistema inmunológico, contra ciertos elementos que, aunque inocuos para la mayoría de las personas, son percibidos como dañinos por nuestro organismo y por lo tanto rechazados por este.

Recordemos que el sistema inmunitario tiene como función proteger nuestro cuerpo de cuerpos extraños, virus y bacterias. Sin embargo, en algunos casos, responde a elementos normalmente inofensivos denominados alérgenos, con una serie de síntomas molestos.

En este estado de hipersensibilidad y excesiva actividad inmunitaria, se pueden presentar diferentes manifestaciones como reacciones en la piel, alteraciones en el aparato digestivo y problemas respiratorios, entre otros.  

Cabe mencionar que como la alergia es un estado, es posible desarrollar una alergia a cualquier cosa a las que el cuerpo se torne sensible. Pero entre las sustancias que más frecuentemente son considerados alérgenos se encuentran los ácaros de polvo, el polen, así como ciertos medicamentos y alimentos.

Las alergias y la biodescodificación

Según la biodescodificación, las alergias son el reflejo de una situación de nuestra vida que no queremos enfrentar. Mientras que el alérgeno detonante simboliza aquello contra lo que luchamos.

Un 10% de las alergias provienen de un conflicto transgeneracional, y son las que se consideran estructurales. No obstante el resto son las denominadas alergias coyunturales, en las que la hipersensibilidad se genera a partir de un momento de impacto emocional.

En estos casos, se producen dos etapas, una de sensibilización, en la que el sistema inmunitario identifica el alérgeno y fabrica anticuerpos específicos; y otra de hipersensibilidad, en las que los anticuerpos se activan para neutralizar los alérgenos, desencadenando la reacción alérgica.

Cabe mencionar que ese primer episodio en el que se programa la alergia, se produce debido a un evento emocional extremo, que sobrepasa nuestros límites. Por lo que no somos capaces de gestionarlo conscientemente, poniendo de manifiesto una solución biológica inconsciente.

Por otra parte en la segunda etapa, también llamada fase ruidosa, es cuando se produce una situación parecida al shock emocional inicial, y que actúa como un recordatorio inconsciente, cuyo objetivo es evitar que entremos en contacto con el dolor emocional residual.

Entonces la reacción alérgica es la reactivación de un conflicto biológico. La cual se produce por el recuerdo inconsciente de las circunstancias o el momento en que se produjo el conflicto. De allí que el alérgeno puede ser incluso un olor, un sonido, un alimento, etc.

Muchas personas desarrollan alergia al gluten debido a conflictos familiares | Pixabay

Significado emocional de algunas de las alergias

Desde la perspectiva psicosomática, la mayoría de los síntomas alérgicos provocados por la liberación de histamina, reflejan el deseo de evitar el contacto con el alérgeno, que en realidad representa el evento traumático detonante de emociones negativas. Algunos ejemplos son:

  • Conjuntivitis alérgica: que se asocia con no querer ver una situación o una persona que resulta emocionalmente desestabilizadora.
  • Dermatitis alérgica: las reacciones alérgicas en la piel se vinculan con la sensación de no querer o no poder estar en contacto con algo o alguien.
  • Rinitis alérgica: refleja el deseo de expulsar a alguien del espacio de seguridad o libertad personal.
  • Edema de Quincke: se ubica en la garganta, y por lo tanto, se asocia con el deseo de decir o expresar algo que por alguna razón se ha tenido que callar.
  • Alergia a la leche: comúnmente se vincula con conflictos de separación de la madre, o una relación conflictiva con ella.
  • Alergia a un animal: posiblemente vinculado con alguna situación traumática en la que un animal de este tipo estuvo presente.
  • Alergia al sol: se relaciona con un conflicto de separación con el padre, o con una relación problemática con él.
  • Alergia al gluten: tiene que ver con conflictos familiares como rupturas, peleas, falta de comunicación, etc.
  • Alergia al polen: vinculada con relaciones amorosas o conflictos con la sexualidad.

Por qué es importante conocer el origen emocional de las alergias

Identificar qué o quién es el detonante de una alergia es fundamental. Pues solo de esta manera podremos enfrentar y sanar el conflicto que se esconde detrás de sus síntomas.

La técnica de descodificación biológica busca localizar el momento preciso en que la alergia se programó en el inconsciente, con la finalidad de desactivar las memorias sensoriales o railes que se produjeron durante el bioshock.

Determinar cómo nos sentimos durante ese impacto emocional, y encontrar la manera de expresarlo y gestionarlo apropiadamente nos proporcionará una salida consciente de la situación, con lo cual tendremos mayor posibilidad de sanación. ¡Si necesitas ayuda, no dudes en contactarnos!

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