Las creencias limitantes sobre la salud son aquellas que, de manera inconsciente, te bloquean o impiden tomar acciones para mejorar tu bienestar. Es decir condicionan tu vida de tal forma que limitan tu salud física, impidiéndote alcanzar una mejor calidad de vida.
Todos tenemos nuestro propio sistema de creencias. El cual se conforma por todas las ideas, prejuicios y suposiciones que definen nuestra manera de pensar y actuar. Así como en la manera en que nos relacionamos, tomamos decisiones y nuestro desarrollo personal en general.
Nuestras creencias son el resultado del aprendizaje y las experiencias que vivimos desde nuestro nacimiento. De manera que hacemos una interpretación propia de la realidad, tomando en cuenta también el entorno social en donde nos desarrollamos.
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Cuando nuestras creencias son racionales, es decir, se ajustan a la realidad y contribuyen a generar soluciones, pueden considerarse adaptativas. Pero cuando obedecen a interpretaciones inflexibles y catastróficas pueden generar reacciones desproporcionadas o irracionales.
Las creencias limitantes sobre la salud pueden incluir pensamientos del tipo: “no soy buena para hacer ejercicios”, “no puedo bajar peso porque todos en mi familia son gordos”, “ya soy muy mayor para hacer deporte”, “no soy capaz de mejorar mis hábitos alimenticios”, etc.
Cómo vencer las creencias limitantes sobre la salud
Aunque no siempre resulta fácil, es muy importante tomar consciencia acerca de estas creencias para que podamos cuidarnos más apropiadamente. Para ello debemos prestar atención en nuestra forma de comportarnos y cuáles pensamientos nos conducen a esa manera de actuar.
Luego necesitarás transformar esa creencia en una que te ayuda a potenciar el cambio que necesitas. Procura enfocarte en tus motivaciones, es decir, en todos esos beneficios que deseas conseguir luego de superar tus barreras mentales.
Es aconsejable que recibas una evaluación médica para que te oriente acerca de la manera en la que debes modificar tus hábitos y luego decídete a incorporar cambios paulatinos que te ayuden a conseguir tus objetivos. Pedir asesoría a un coaching profesional también puede ser muy útil.
No necesitas apuntarte a un gimnasio, pues siempre puedes optar por recursos gratuitos como ejercitar al aire libre o en tu propia casa. También debes tener expectativas realistas y ser constantes. Por ello es importante encontrar una actividad física que realmente disfrutemos.
Una de las creencias limitantes sobre la salud más común es la falta de tiempo. Pero debes tener en cuenta que este aspecto debe ser una prioridad en tu vida, ya que si cuidas mejor de ti, tendrás más energía para todas tus actividades porque tu cuerpo funcionará mejor.
El pensamiento positivo será tu mejor aliado en este aspecto. Procura reflexionar sobre la importancia de cuidar tu salud, y los beneficios que te aportará. Luego ejecuta las acciones necesarias a tu propio ritmo, intentando no hacer comparaciones con los demás y celebrando los pequeños avances.